Friday, November 20, 2020

Aún no te conozco

1 – Hoy, en el último post dedicado a canciones de las que escribo siguiendo una suerte de pedido, voy a escribir sobre el artista conocido como Herbert y su canción llamada “Leave Me Now”. Una canción que se encuentra en el disco “Bodily Functions” del 2001. Matthew Herbert es un genio. Editó este discazo y muchas obras más con los más variados seudónimos. Esto, básicamente, es house. Pero house de excelente calidad. Con arreglos lujosos, con la maravillosa voz de Dani Siciliano. Con los patrones rítmicos repetitivos clásicos del house, pero en esta ocasión llevados a cabo con una sobria exuberancia. Es una canción que al oyente le toma varias escuchas ir asimilando todos sus variados componentes. Matthew pone a Dani Siciliano a cantar un mismo verso de varias maneras. En ocasiones uno puede escuchar a tres Danis distintas sonando a la vez, logrando que el embrujo que ya experimentábamos se amplifique y se altere redimensionándose. Lo más milagroso es que este juego de planos sonoros en interacción sucede en cada instante. Al punto que puede llegar a pasar que guardes en la memoria algo que en la canción no sonó.

 

2 – Esto último lo digo en serio. En todas las canciones están presentes elementos que se reiteran y elementos que no. Usando el esquema rítmico repetitivo del house, Herbert aprovecha para hacerme un truco que, cuando me di cuenta, me voló la cabeza. A los 4 minutos 33 segundos empieza a repetir una figura melódica con el teclado a la cual le va poniendo de acompañamientos unas notitas sueltas aquí y allá que luego parecen estar reunidas en tres notas a los 5 minutos 11 segundos. Esas brillantes tres notas son tan hermosas que uno las adhiere a ese patrón melódico que se iba repitiendo y, en una segunda escucha, esperas que esas tres pequeñas notas también se repitan… y no sucede. Yo me imagino que el tipo ya sabía que uno iba a hacer eso. Cuando estas en esa segunda escucha, te suena como si le hubiesen quitado algo a la canción y que ahora te lo van entregando a cuentagotas, una notita acá, otra notita allá. GENIO.

 

3 – Yo me pregunto: ¿Cómo no voy a enamorarme de una canción así? Tiene ritmo y puede bailarse. Tiene emoción y te puede poner la piel de gallina. Tiene misterio, tiene personalidad. Tiene la voz de una mujer. Habla de algo que se terminó y también parece hablar de algo que tendría que empezar a suceder.

 

4 – Bien, bien. Fueron 52 canciones en 49 posts, si no conté mal. Todas inspiradas en ese desafío que andaba dando vueltas por ciertas redes sociales. Ellos dijeron “25 días 25 canciones”. Bueno, a mí me gusta hacer las cosas de distinta manera. Muchas gracias a todos los que leen este blog y a los que no, muchas gracias también.

 

 

Thursday, November 19, 2020

Dándote mi amor

1 – El grupo es Gong y la canción se llama “Givin’ My Love To You”. Dura poco más de medio minuto. Está en el disco “Angels Egg” que fue publicado en 1973. La consigna me pedía que escriba sobre una canción que dice mucho con poco. En este tema solo son ellos, unos efectos de sonido que dan la sensación de que grabaron en un bar, un teclado atorrante que suena a piano viejo en segundo plano. Todos cantando juntos en un coro ebrio. Un par de estrofas llenas de júbilo y embriaguez y listo. Una pequeña pieza que grafica su espíritu en una escena entrañable. Dan ganas de escucharla con un vaso en la mano. ¡Salud!

 

2 – Los Gong más que un grupo eran una colectividad, eran únicos. Surgidos del caldero mágico de la psicodelia inglesa, ellos continuaron con su ánimo juguetón atravesando los más diversos estilos, construyendo paisajes a base de una lectura personal de la progresiva, el jazz, las músicas étnicas, la electrónica y la electroacústica. Cuando los setentas fueron avanzando supieron incluir a las mentes más abiertas, febriles e inquietas del universo postpunk. Es este un grupo de ricas dimensiones. No puedo explicarme porque escuche solo un par de discos de ellos. Quizás es que me faltó leer algo acerca de ellos, como aquellas legendarias reseñas que, según dicen por ahí, salieron en revistas tales como Expreso Imaginario o El Musiquero. Un día de estos voy a concentrarme más en sus músicas.

 

 

Wednesday, November 18, 2020

Cuatro canciones que me habría encantado componer

 1 – Hay muchas más, pero lo cierto es que leí eso de “escribí sobre una canción que te habría encantado componer” y a mí se me aparecieron 4 en la mente. Que me sepan perdonar todas esas otras canciones que también las siento tan mías que pienso: “lástima que no las compuse, pero que suerte que alguien sí lo hizo”.


2 – El grupo es Oracle y la canción es “World is turning”. Esta banda es uno de los numerosos proyectos post Wire de sus inquietos integrantes. Busquen aquellos discos de Wire y busquen todos esos proyectos, hay recompensa sonora garantizada. El disco en el que se encuentra esta maravilla se llama “Tree”. Son casi 6 minutos de perfecto paraíso. Los responsables de este milagro son Colin Newman, Malka Spigel y Samy Birnbach. Esto tuvo lugar en 1994. Hay una base house, unas hermosas líneas de bajo, un relato de un hombre en una atmosfera opresiva y luego el relax de la voz femenina, cuerdas que remarcan esa calma. Preciosas figuras circulares de teclados que se van acumulando poco a poco. Toques de guitarra eléctrica. Misteriosos sonidos de teclados, sonidos quizás logrados manipulando samples. Toda la canción está dedicada a pasearnos por los paisajes de un mundo que está girando. Yo, a veces, me quiero quedar a vivir adentro de esta canción.


3 – El grupo es Television y la canción es “Marquee Moon”. El homónimo disco que la contiene es de 1977. La voz única, mágica de Tom Verlaine, su poesía vibrante. El entretejido de guitarras eléctricas de Verlaine y Richard Lloyd. La base insuperable de Fred Smith y Billy Ficca. Esos cambios de dinámicas, ese solo de Verlaine que te habla y llora junto a vos. El piano que acompaña tramos de la canción. El disco entero está repleto de lujos, es uno de los mejores discos de todos los tiempos. No obstante, esta canción brilla en sus casi once minutos de duración. Más cercanos a las sutilezas del folk de Nick Drake o la psicodelia de los sesentas que al punk, nunca me voy a cansar de estremecerme una y otra vez con esta preciosura.


4 – El grupo es The Beatles y la canción se llama “If I Needed Someone”. Esta gema la podés encontrar en “Rubber Soul” (1965). El enorme George Harrison compuso esta hermosísima canción. Supe decirle a alguien: “esta canción es linda en el primer segundo, en el último segundo y en todos los segundos que van al medio”. No me equivoque. Esta es la prueba irrefutable de que estos cuatro guachos pulenta eran los mejores.  Dicen los que saben que este es un homenaje a The Byrds. Algunas de las músicas que tuvieron lugar en los sesentas son de una belleza inconmensurable. No es cosa de todos los días hallarse en una cumbre así.


5 – El grupo es The Misunderstood y la canción se llama “I Can Take To The Sun”. Este es otro milagro de la psicodelia. Adelantados a su época, apoyados por el gran DJ John Peel. Nunca pudieron sacar un álbum. Menos mal que al menos sí pudieron grabar sus canciones, que luego fueron apareciendo en compilados. Yo conozco esta canción gracias a las labores del excelente sello Cherry Red Records que en 1982 editaron una recopilación llamada “Before The Dream Faded”. Esta canción es de 1966. Inicio de misterio y luego guitarras que recargan el aire de emoción. Lo contenido durante algunos versos y lo desatado de los estribillos. Paulatina inmersión en turbulencia que desemboca en un remanso. Esa preciosa guitarra acústica al final, con aires de flamenco. Constatar estas magias te dejan un sabor agridulce. Por un lado, la alegría de escucharlos. Por el otro, la tristeza de que las mayorías no los conocen. Estas son canciones que deberían sonar en todos los hogares. Mejora los climas del alma.