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1 – En el post anterior, ese que trata de los podcasts y My Tuner, les comentaba, sin hacer foco en ello, como las revistas de músicas parecen estar extinguiéndose poco a poco. No es que este tan seguro de ese hecho, pero sí estoy seguro de que las que aún existen ya no gozan de la repercusión y popularidad que supieron tener en los años idos. No obstante, el tema de este post no gira en torno a si esto es así o no y cuáles serían las causas que terminan en ciertos efectos. El tema de este post es recomendarles la lectura de un libro que trata sobre revistas de músicas.

2 – El autor es Leandro Donozo. El libro se llama Guía de Revistas de Música de la Argentina (1829-2007). Es un libro que ha sido editado en 2009. La editorial es Gourmet Musical. Ya hablé de libros publicados por esta editorial en varias ocasiones. Libros de Norberto Cambiasso, de Abel Gilbert, el de las mil y una vida de las canciones, el que trata sobre la revista Expreso Imaginario. Junto a Dobra Robota y Caja Negra Editora conforman el trio de editoriales sobre músicas y aledaños que siempre hay que tener en cuenta.

3 – Para adentrarme en el cosmos frondoso de esta obra, fui anotando unos machetes como para que sea más sencillo desarrollar este post. Voy a empezar con ciertas preguntas:

¿Cuándo? Como reza el título, el libro abarca un periodo de publicaciones que van desde 1829 hasta 2007. Es estrictamente así, aunque el autor tuvo que encontrarse en numerosas ocasiones con la ausencia del material a indagar. Cuando fue así, él se limitó a indicar que fuente mencionaba esas publicaciones que parecen haber desaparecido.

¿Quién? El libro tiene un índice onomástico con cerca de 12.000 entradas. Citando el prólogo de Melanie Plesch en la página 10: “…conecta a los distintos autores con las diversas publicaciones en las que colaboró (sic), revelando en muchos casos redes intelectuales hasta ahora invisibles.” No solo eso, también se va revelando un perfil posible de cada publicación. Elegir quienes escriben acerca de que, es una de las formas de las políticas de los textos. De ese índice pude reconocer unos 900 nombres propios. No todos pertenecían a autores nacionales de las épocas que señalé más arriba, también pude encontrarme con un Aristóteles, un Platón, un Poe. El asunto pasaba por indicar quien firmó algún texto.

También hay un índice de editoriales e instituciones que refiere a quienes publicaron alguna de las revistas.

¿Dónde? El índice de revistas te dice dónde ir a buscar cual autor y también figuran detallados los posibles archivos donde buscar esas fuentes. Hay 450 publicaciones reseñadas al detalle. Números existentes de cada publicación y cada colaborador, corresponsal y artículo firmado.

¿Qué? Buena pregunta. Quizás la respuesta a esta pregunta este en el Diccionario Bibliográfico de la Música Argentina y de la Música en la Argentina (también de Donozo, también de Gourmet Musical). Este libro de hoy nos dice quien escribió en donde y cuando pero no nos cuenta acerca de que escribió.

¿Cómo? Muy buena pregunta. ¿Cómo escribieron? Habrá que consultar las revistas específicas.

¿Por qué? Excelente pregunta. Hay que preguntarle a los autores y a los editores también. Y cuando el autor o la autora ya han fallecido habrá que consultar a personas allegadas o fuentes bibliográficas relacionadas con la labor del escriba.

4 – Mucha agua pasó bajo el puente desde el 2009. Estamos hablando de 12 años de distancia entre el libro y nuestro presente. Hay un par de cosas que señalar que están conectadas con aquel 2009 y un par de cosas a tener en cuenta relacionadas con este 2021.

2009 A – La influencia de las revistas extranjeras de música. Uno de los propósitos de este trabajo es ayudar a quienes deseen estudiar las músicas de nuestro país, como para reconstruir un mapa de influencias. Las personas músicas de Argentina no solo fueron conociendo bandas y solistas por escucharlos de la radio o comprando discos, sino también leyendo acerca de ellos en revistas. Consultar esas revistas ayudaría a conocer, con miradas ricas y profundas, la circulación de información y probables paradigmas de consumo y producción que alentaban ciertas expresiones y desaconsejaban otras. Pero todo esto no solo tuvo la influencia de revistas nacionales, las revistas importadas también aportaron algo. Sé que hubo revistas estadounidenses, francesas e inglesas disponibles en ciertos lugares de CABA desde fines de los sesentas y, especialmente, durante el 1 a 1 de la década de los noventas. Pero especialmente hubo publicaciones españolas disponibles en Argentina y, a veces, tenían distribución nacional. Rock de Lux, Factory, Trax, Go Magazine y algunas más que ahora no recuerdo. Este periodismo español tuvo una influencia en las músicas de estos lugares.

2009 B – Músicas en suplementos de diarios y revistas de cultura general. Con solo seguirle la pista a mis tres referentes de la crítica musical vernácula (Alfredo Rosso, Norberto Cambiasso, Pablo Schanton) se hacen evidentes las faltas. Falta hablar de la revista Cerdos & Peces, donde los tres escribieron, lo mismo que falta nombrar las contribuciones de los dos últimos a la revista Rock & Pop. Faltan los trabajos de José Bellas y Fernando García en la Rock en Blanco y Negro. Faltan los trabajos de ellos dos y de Schanton en el Suplemento Sí de Clarín. Falta el Suplemento No de Página 12. Falta el Suplemento El Tajo del diario Sur.

Estas carencias (lo de las revistas españolas y la de revistas y diarios que no hablaban exclusivamente de músicas, pero aportaban lecturas valiosas e imprescindibles sobre las mismas) harían que el trabajo se vuelva casi imposible de plasmar. Leandro mismo lo aclaró, este libro no deja concluido el tema, este libro le da inicio. Tal vez se trata de ayudarlo a Donozo a continuar con la tarea. También quizás se trata de volver más específico el área de análisis, que trate de un segmento particular de las músicas. Todas mis observaciones de esta obra provienen del mundo del pop y rock, no las pensé desde el tango, el folklore, el jazz o el blues, por ejemplo.

2021 A – Aparición de archivos PDF. Hasta el momento, me ha sido posible localizar archivos pdf de las revistas Expreso Imaginario, Mordisco, Canta Rock y Pelo. Si los hay de otras revistas, aun no me fue posible ubicarlos. Agregar estos archivos cambiaría sustancialmente lo que este libro tiene ya registrado.

2021 B – Despedidas y Apariciones. En noviembre del 2010 se terminó la revista La Mano. En agosto de 2018 se terminó la revista Los Inrockuptibles. En algún momento del 2008 apareció la revista Billboard (¿seguirán saliendo?) La verdad no sé cuántas revistas de músicas han ido apareciendo desde el 2008 en adelante. Todas estas mutaciones, lo que cesó de existir y lo que nació, también son actualizaciones que necesita esta obra.

5 – Me gustó enterarme de que el hecho de no tener colecciones completas de varias de las publicaciones catalogadas no le resultó un impedimento a la hora de sentarse a escribir y publicar el libro. Leandro Donozo se habrá dicho a sí mismo “Laburamos con lo que hay, más adelante le iremos anexando lo que se vaya sumando”. Valiosa decisión. Porque si esperaba a completar las colecciones de revistas, no publicaba nunca más la obra.

 6 – José Bellas escribe en la Rolling Stone, que es una revista del grupo La Nación. Pablo Schanton escribe en el diario Clarín, que pertenece al grupo homónimo. No tengo ganas de darles mi dinero a ninguna de esas dos mega corporaciones, ni por muy buenas que pudiesen ser las contribuciones de sus autores de textos. Porque ellos nunca me dan su dinero, solo me dan papelitos de colores.

7 – Leer y revisar los datos que este libro trae nos pone en un contexto de relectura de aquellos pasados a la luz de estos presentes. La otra vez los llamaba a ustedes a encender la radio para que las músicas no queden depositadas en un download estéril, sin ruido social ni conmoción emocional. De estas dos cosas también deberían estar hechos los textos, sin importar donde aparezcan, ya sea en el kiosco de diarios y revistas como en Internet. Suscríbete al proyecto Gourmet Musical consiguiendo este libro y los otros también. Y seguiremos pensando como aportamos a los proyectos del gran Donozo.

Posdata: Encontrarme con ciertos nombres (Thurston Moore, páginas 153, 252; Mick Farren, páginas 80, 223; Nick Kent, páginas 95,123,238) fueron muy agradables sorpresas. Me extraño no haberme topado con Lester Bangs, entre otros.

 

Enciéndete

1 – En una de esas charlas ociosas que tuve hace algunos años atrás se me ocurrió comentar que quizás la radio tenía sus días contados. Como le fue pasando a las revistas de músicas, las cuales han ido menguando hasta que hoy en día pocas son las que aún persisten, yo solía pensar que a las estaciones de radio les estaba ocurriendo algo similar.

2 – Y resultó ser que estaba equivocado. Seguro que suele pasarme seguido, eso de equivocarme. Y mucho más cuando abro mi bocota. Cuando escribo trato de no equivocarme tanto. Para cualquier lector que sienta la curiosidad suficiente como para comprobarlo, ahí tienen disponible casi dieciséis años de textos en este Significados Invisibles, el blog que también persiste, vaya uno a saber por qué.

3 – Estaba equivocado por muchas razones. Hoy solo voy a detenerme a escribir sobre dos en particular. La primera razón es la existencia de los podcasts. Numerosos, quizás más numerosos que los blogs. No tengo los números porque no me moleste en averiguarlos, pero creo estar casi seguro de que hay más podcasts en este mundo de comunicaciones que es Internet que los blogs existentes. Los podcasts son básicamente programas de radio personalizados por sus creadores. Archivos de audio editados o sin editar. Voces que se hacen oír. También hay emisoras de radio que recurren a este recurso como para difundir programas de radio específicos ya emitidos, que quedan registrados para quien quiera escucharlos.

4 – La segunda razón es el corazón de este post. Me encontré de casualidad un sitio llamado My Tuner. Este texto tiene el propósito de difundir su existencia y alentar a los amantes de las músicas a que lo recorran. Satisfacción garantizada. Fue solo cuestión de escribir, en el buscador de Google, las palabras “Nostalgie FM de los noventas” para dar con el sitio. Te vas a encontrar con 52 emisoras que se corresponde con la búsqueda “FM Nostalgie”. ¡52 emisoras! Y también hay radios online, hay podcasts, hay radio de todos los estilos, épocas y lugares del mundo. ¡Está muy zarpado!

5 – Estando ya en el sitio, dándole clic a múltiples opciones que se me aparecieron, me acorde de la radio en la cual las gentes de la revista inglesa The Wire tienen un programa para difundir los artistas que ellos tratan. La radio es Resonance FM. Van a poder acceder a ella a través de My Tuner o directamente a través del buscador de Google. Esta es una gran emisora de radio, más allá de ser el lugar elegido por los hacedores de The Wire para poner al aire esos sonidos de los cuales ellos escriben.

6 – Y hablando de The Wire Magazine. Cuando yo estaba pensando en escribir este post y en qué cosas comentar y como desarrollarlo, me entero de que ellos van a publicar un número especial dedicado a diversas estaciones de radio. Sera el 449, de julio de este año. ¡Qué lindo sería poder leer ese número! ¿De qué radios hablara? ¿De qué programas? ¿De cuáles lugares? Quizás alguien suba una lista de esos contenidos. Sera cuestión de averiguar.

7 – Si sé que el Ale fue uno de los que me tiró una punta como para que vaya a curiosear por el terreno de los podcasts y sé que fue el recordar una FM de los noventas llamada Nostalgie la que me llevó a My Tuner, me parece que tendría que develar cual fue el estado de mis búsquedas, ese estado que me ofrece un marco de referencias para desear buscar lo que busco.

8 – No es algo referido a la nostalgia, como me señalo un amigo. Tampoco es como un efecto colateral de tanto Coronavirus y tanto presente difícil y doloroso a veces. No es volver al pasado a modo de escape ante un presente a veces insoportable, no es volver al pasado por extrañarlo. Es que el download de Internet te ofrece las músicas, pero no te ofrece las relaciones que se construyen a través de las músicas. Tengo ciertas incógnitas musicales del ayer, todas provenientes de escucharlas en programas radiales de antaño. No hay download del 2021 ni reseña presente que vaya a solucionar esto, salvo si trata de alguna reedición. Además, escuche muchísimo del año pasado, pero no lo disfrute como cuando iba al paso más lento de la compra de ediciones en las disquerías. A veces escuchar demasiado se parece a no escuchar nada. Por ende, volví a las radios, queriendo enterarme de cosas que ayer no pude.

9 – Atender ciertos podcasts, pensar la radio. Son cosas que quieren decir que hay un extra que le podemos agregar a las músicas para revalorizarlas. Contextos de interpretación. Contextos de experiencias. Enciendes la radio para vivirla.